Filosofía de inversión
Palm Harbour Capital sigue una filosofía de inversión basada en es el estilo value. En su forma más básica, esto significa determinar el valor intrínseco de una acción y comprarla cuando su precio esté significativamente por debajo de dicho valor.
Creemos que comprar acciones con un gran descuento sobre su valor intrínseco es prudente ya que la valoración de empresas es un arte impreciso y eventos inesperados ocurren con regularidad.
Nos beneficiamos del bajo precio al que compramos la acción a medida que su precio converge hacia su valor intrínseco y del crecimiento compuesto de este valor intrínseco, mientras esperamos a que el mercado reconozca dicho valor. Creemos que existen ciertos conceptos necesarios para seguir esta filosofía de inversión:
• Tener perspectiva de propietario del negocio. Vemos las acciones como propiedad de parte de un negocio, no meros papeles que cambian de manos en los mercados. Esta perspectiva nos permite pensar como propietarios del negocio a largo plazo y tomar decisiones en base a los intereses de la compañía y nuestros inversores.
• El precio de mercado es incorrecto en muchas ocasiones. Existen muchos factores que causan estos errores, como pueden ser las restricciones sobre inversores institucionales, los sesgos psicológicos, el cortoplacismo, la falta de liquidez o el crecimiento de la inversión pasiva.
• Centrados en los riesgos de caída y la preservación de capital. La avaricia guía a muchos actores de los mercados. Sin embargo, el interés compuesto solo funciona si no se pierde capital. Esto se traduce en encontrar oportunidades de inversión con gran potencial, pero riesgo de caída limitado.
• Enfocados al retorno absoluto. No seguimos a ningún índice ni grupo de competidores. Nos centramos en encontrar ideas que sean grandes inversiones.
• Orientados hacia el largo plazo. Las buenas ideas pueden requerir paciencia y ya que el mercado es muchas veces cortoplacista, aprovechamos la volatilidad del corto plazo para adquirir buenas empresas.
• Desarrollo del negocio en el largo plazo. Buscamos empresas con ventajas competitivas sostenibles y que tengan oportunidades de crecimiento (altos retornos sobre capital tangible junto con oportunidades de crecimiento).
• Mejora constante, aprendiendo de los errores. Somos conscientes de que ningún proceso es perfecto y de que cometeremos errores. Nos esforzamos en perfeccionar nuestro proceso inversor continuamente y en incrementar nuestro círculo de competencia
• La volatilidad no es sinónimo de riesgo. Es más, ofrece oportunidades. Riesgo es la probabilidad de pérdida permanente de capital.
• Divergente. Tenemos a menudo puntos de vista contrarios a la opinión convencional y generalizada.
Creemos que solo podemos aplicar estos principios mediante
- Análisis exhaustivo; conocimiento profundo de los activos
- Adherencia a un proceso inversor planificado, disciplinado y objetivo.
- Confianza en el análisis propio – habilidad para ignorar lo que no es importante
- Perspectiva largoplacista.
- Fe. Los precios convergen hacia el valor intrínseco a lo largo del tiempo. Los precios reaccionan exageradamente en el corto plazo, pero tienden a su valor intrínseco en el largo plazo.
Nuestros clientes comparten nuestra filosofía y nuestro proceso inversor y entienden que tenemos a menudo opiniones contrarias al mercado. Ninguna filosofía de inversión, por muy sensata que sea, funciona todo el tiempo.
Estrategia de inversión
Después de haber seguido cientos de compañías europeas a lo largo de los años, obtenemos ideas de numerosas y distintas fuentes. Analizamos un amplio abanico de situaciones especiales como spin-offs, privatizaciones, cambios de equipos directivos, desinversiones, concursos de acreedores o derechos de suscripción. Buscamos situaciones en las que los vendedores tengan motivos de venta ajenos a los fundamentales y valor intrínseco de la compañía, permitiéndonos comprar acciones a precios de descuento. Tenemos una gran red profesional en el mundo empresarial y en la comunidad inversora. Seguimos con atención varias industrias, estudiando revistas e informes especializados por sector y entrevistándonos con expertos.
Una vez hemos identificado una inversión potencialmente interesante, llevamos a cabo un intenso estudio. Estudiamos los estados financieros de la compañía y establecemos la naturaleza del negocio y cuál es la causa de la oportunidad de inversión. Si es interesante, realizamos un análisis concienzudo de la compañía y su industria para entender cuáles son las preguntas clave de la oportunidad. Es entonces cuando contactamos con expertos de la industria para responder a estas preguntas. Hacemos de ‘abogado del diablo’ y ejecutamos test de estrés. Seguimos ciertas variables clave para comprobar que nuestra tesis de inversión es correcta.
Finalmente, construimos una cartera diversificada y con empresas de alta calidad o inmersas en situaciones especiales, las cuales monitorizamos con exhaustividad. Invertimos oportunistamente y vendemos las acciones cuando su precio se acerca a su valor intrínseco, cuando nuestra tesis resulta incorrecta o cuando encontramos una idea de inversión más atractiva.
Nuestro proceso es claro, disciplinado y consistente. Aplicamos rigurosos controles de riesgo antes de realizar una inversión, mientras la acción está en cartera y de manera holística a nivel de cartera.